viernes, 29 de junio de 2012

Franklin

Pues parece ser que llega el momento de hablar del padre, de Franklin. He de decir que yo no lo tengo en tan mala estima como Livia y Bichejo. Es cierto que también aparece como un estereotipo. El americano triunfador y amante de su país. El típico chico sanote que no me acuerdo si jugaba al fútbol americano o al beisbol, pero a algún deporte.

Es el que quería tener hijos y el que presionó hasta convencer a Eva para tener a Kevin y, sin embargo, se tomó casi como una jugarreta el que Eva se quedara embarazada de Celia.

Su principal defecto, pero que precisamente es lo que para mí lo humaniza, es que quiere demasiado a Kevin como para darse cuenta de lo malo que es. Kevin se lleva por delante su matrimonio y él sigue sin creer a Eva, a la que acusa de que está celosa de la buena relación entre Kevin y él, y él sigue creyendo y queriendo a Kevin. Ese niño con el que una vez a la semana juega al frisbee o le acompaña a tirar flechas en el jardín de casa. Y el caso es que puedo entenderlo perfectamente. Puedo entender ese amor que no te hace darte cuenta de la realidad, que te hace negarla una y otra vez hasta que revienta delante de ti. Siendo un libro tan terrible, para mí el dolor máximo no es el de Eva, sino el de Franklin en ese momento en el que corre a ayudar a Celia, se da cuenta de que su hijo la está asaeteando y su hijo se vuelve hacia él y le dispara con la ballesta. Si hay un momento en el que se puede romper un corazón, es ese momento. Supongo que en ese momento pasaría toda su vida ante sus ojos y vería que ha suspendido... tiene que ser terrible.

Para mí el problema es que él quiere a una imagen de su hijo que no es real. Seguramente no pasa el suficiente tiempo con él para darse cuenta de cómo es su hijo y ese es su defecto, pero no el amar a su hijo y creer lo que dice.

Identificado su problema, no debemos olvidar que lo vemos a través de los ojos de ella por lo que tampoco tenemos una visión exterior (y objetiva, si eso fuera posible) de la historia. Es cierto que cuando le dice que quiere separarse, que ya no puede confiar en ella, parece el malo de la película. También hay otra parte extraña y es, como he dicho antes, el escaso amor que siente por Celia a la que siempre está haciendo burlas y diciendo que es una llorona. Esa idolatría por Kevin y ese cierto desprecio o decepción con Celia, esa ambivalencia en su papel de padre es algo desconcertante.

En fin, que es estereotípico en su faceta exterior. Tiene comportamientos diferenciados hacia cada miembro de su familia. Pero a mí no me parece mal que crea a su hijo, porque no es un comportamiento racional, es emocional y, aunque nos parezca que nosotros nos daríamos cuenta, o que nosotros lo haríamos de otra manera, mejor; eso no lo sabemos. Los sentimientos no son, o no deberían, ser fáciles de juzgar.

5 comentarios:

  1. A mí hay una cosa que no me parece normal, que es ese amor tan brutal, ciego e incondicional a Kevin, que parece que se refuerza riéndose de Celia y pasando de ella.

    Yo no lo entiendo. ND, tú que sí tienes hijos, eres capaz de imaginarte esa dualidad de sentimientos respecto a ellos? A mí, como hija, me choca infinitamente.

    En el libro hay un momento en que dice justo eso, que tus hijos tienen el poder de romperte el corazón, ese momento de certeza de Franklin de que su hijito del alma era aún mucho peor de lo que Eva le decía...

    Por otro lado, el problema (no sólo de padres e hijos, en muchas relaciones) es montarse la imagen de cómo es una persona antes de conocerla, y claro, es mucho más bestia en este caso, de adoración total...es lo malo de adorar, que no es racional, y da igual lo que se muestre.

    Y ya, que me enredo.

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  2. Bueno, es que Franklin y Eva son casi especulares en relación a sus hijos, siendo los hijos también diametralmente opuestos.
    Yo, como padre, no puedo entender esa diferencia de amor hacia uno y otro. Y menos aún siendo Celia tan buena e inocente.

    Ya digo que yo entiendo mejor ese amor por el hijo malo que el desprecio por la hija buena, que me parece incomprensible.

    No es extraño ver a madres en la tele defendiendo a su hijo asesino y diciendo que él es bueno. Incluso Eva, siendo consciente de la maldad de Kevin, se queda a su lado y supongo que le pagaría el abogado.

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  3. Al principio del libro, Eva define a Franklin como "un americano de verdad"... yo lo entiendo, su personalidad, sus errores y también -paradójicamente- sus virtudes, como una crítica no muy oculta al "Dios salve América" pero no sé hasta qué punto estoy afinando de más; Eva presenta a Franklin como una mezcla de bondad sobria pero prepotente y ceguera crónica y eso es lo que el prejuicio le achaca a los americanos en general...
    Sí que es cierto que Franklin quiere a Kevin por encima de todo pero también lo es que Kevin "le esconde" a Franklin muchas cosas, por lo que le ayuda en su ceguera deseada, pero lo que lo hace tan "especial" (como los niños especiales XD) es que decide conscientemente no creer a Eva, que es el adulto, porque se niega a que su hijo sea tan raro, aunque lo sea (si la niñera se va es culpa de la niñera, etc, etc)
    Es decir, entiendo su "amor incondicional" pero no le perdono el abandono; se puede querer viendo todos y cada uno de los defectos, desde mi punto de vista eso nos hace mejores, más generosos; Franklin sólo quiere de verdad lo que ve "bueno sin matices" y Celia es llorona, frente a Kevin, que hasta el final (meses) es ante sus ojos, y delante de él no lo olvidemos, fuerte, con personalidad y "su hijo sin defectos ni debilidades"

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  4. Pues a mi Franklin me saca de quicio. Una cosa es querer a tu hijo y otra muy distinta ser tonto. Y Franklin es tonto. Ese enamoramiento q tiene con su hijo no es normal...pero lo peor es q ese amor exagerado le haga despreciar a su mujer y a su hija. No tiene sentido. Y no es de persona normal. No tengo hijos, y no puedo saber que se siente pero si mi pareja se comportase como él se comporta con Eva, desde luego que lo habría dejado hace bastante tiempo. Si sintiera que mi pareja no confía en absoluto en mí...que de pronto tienes un una contra dos...
    Vale que ella es fría, y bastante dura (Kevin se parece a ella bastante), pero a mi me daria repelús un marido así. Porque tampoco es q las señales de maldad que emite Kevin sean sutiles.
    Creo q ella se siente culpable xq desde el principio no quiere ese hijo. No lo desea y se ve a sí misma como una mala madre....y por eso aguanta tanta tontería por parte de su marido.
    También es cierto que Eva es una madre bastante inmóvil. Creo q en su situació habría llevado a Kevin a algún psiquiatra, o a alguien que me pudiera explicar qué coño le pasa a mi hijo. No habría servido para nada, es cierto, pero me sorprende que no busque ayuda o respuestas a lo que le pasa.
    Sé que vengo con retraso y escribo a lo bruto con el móvil, si no escribiría más, xq me apetece un montón comentar mil cosas de este libro. Gracias bich x los enlaces.

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  5. No sé si el problema es Franklin o es Eva ; xq si ella es la "cuerda" del matrimonio,yo me hubiera ido luego del incidente del ojo de Celia.
    No voy a entender nunca a quien ame más a su pareja q a sus hijos. Y eso que soy casada y madre

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