Aunque parecía imposible, hemos llegado al último libro de 2015. Nada menos que quince libros y he conseguido leerlos todos. Que no es ninguna tontería.
Para acabar el año, hemos optado por algo ligero. Nada menos que 600 páginas de dos señores con una única teoría de por qué fracasan los países. Y están tan seguro de que su teoría es correcta que nos ponen medio millón de ejemplos que, ¡oh, casualidad! les dan la razón.
Me ha parecido un rollo macabeo de libro. Igual es que soy demasiado lista para ser rubia, pero con el segundo ejemplo ya había captado la idea: cuanto más democrático seas, mejor te va a ir. No me explico cómo no estamos a la cabeza de la civilización occidental. Tampoco me explico lo de China, pero es que igual es que no soy tan lista. Sinceramente, tampoco me interesa tanto el tema.
Lo mejor que tiene es que el 15% del libro son notas bibliográficas y agradecimientos y eso que te llevas. Yo lo he leído casi como un castigo, un 5% diario, a primera hora, en el camino de ida al trabajo, para empezar el día con alegría.
Podría haber sido interesante si no se hubieran regodeado en contar lo mismo una y otra vez y si no se hubiesen remontado a los antiguos mayas para explicar cuánta razón tienen.
He marcado algunas cosas pero ahora me parecen muy aburridas como para volver a copiarlas.
Como siempre, tenéis otras reseñas con más enjundia en los blogs de Carmen, Paula, Newland y Desgraciaíto. Y algún día conseguiremos cuadrar las agendas para hablar un rato de libros.
Para 2016 el plan pasa por leer menos libros juntos. Esperemos que al menos sean mejores.
Me parto con tus críticas! Que el 2016 nos traiga muchos más libros peñazo para ver cómo Bich los critica!! A ver si este año que acabo el estudio de la muerte tengo yo también más tiempo para leer.
ResponderEliminarUn beso!
Ah, y si que eres demasiado lista para ser rubia ;)