lunes, 6 de agosto de 2012

Algunos comentarios kafkianos sobre DFW comentando a Kafka

Supongo que a estas alturas, si estás aquí, ya has leído a Kafka o, como mínimo, te lo sabes al dedillo y has oído hablar de lo kafkiano de El proceso y del pobre Gregorio Samsa que se convirtió en cucaracha/escarabajo/bicho tan repugnante que de lo repugnante que es ni siquiera lo pisas.

Pues bien, a David Foster Wallace, Kafka le parece gracioso, y, podemos decir muchas cosas sobre DFW (cof cof sórdido cof cof) pero es innegable que de literatura sabe mil veces más de lo que yo sabré en toda mi vida y, aunque podemos estar de acuerdo con él o no, analiza la literatura con la profundidad y el acierto que sólo puede dar una cultura descomunal. Y entonces se descuelga con:
Algo que a mí me frustra rotundamente cuando estoy intentando leer a Kafka ante estudiantes universitarios es que me resulta casi imposible hacerles ver que Kafka es gracioso.

Esta frase sacada del artículo me tiene tan patidifusa que aunque estoy de acuerdo con el fondo de análisis que hace sobre Kafka cuando dice:

Lo que afirmo es que la gracia de Kafka se basa en una especie de literalización radical de verdades que solemos tratar en forma de metáforas.

sigo sin ver gracioso a Kafka (aunque confieso que ha estado a punto de convencerme, es más, al leer este artículo sentía que si no lo encontraba gracioso era más por mi falta de sentido del humor que por Kafka... luego terminé de leerlo y recuperé la cordura) y me parece un tanto injusto para con sus alumnos que crea que la culpa es de las referencias que no tienen... porque él las sitúa en el espacio (alumnos americanos) pero yo tampoco las tengo: estuve en casa de Kafka unos 10 minutos y me gustó tanto Praga como detesté a sus habitantes, soy del mismo continente etc, etc pero no veo la cosas a su manera y eso me parece un síntoma de salud mental, con todos mis respetos... pero, vistos otros artículos de DFW puedo entender ya no la admiración que sentía por su manera de escribir sino una cierta sintonía entre ambos autores en la medida en la que, sin saberlo, DFW hace a su manera lo mismo que Kafka, no literaliza radicalmente las metáforas, pero no censura nada en su escritura y es capaz de situarse en un plano tan ajeno a lo que cuenta que todo es sorprendente y consigue que el lector sienta esa misma otredad ¿no es el mundo del porno una metáfora del submundo de lo sórdido como el bicho de La metamorfosis? ¿no es Kafkiano lo que vive en con McCain, el festival de las langostas o el mencionado mundo del porno? 

Kafka se sentía ajeno a todo, DFW también; el primero, para transmitirlo al lector usaba esa literalización radical de las metáforas (en las que lo repugnante era explícito), el segundo nos muestra un mundo en constante estado de perplejidad donde lo más sencillo es absolutamente sorprendente.

En definitiva, al terminar el el libro volví a este artículo y me pareció que, sin saberlo y sin pretender en ningún caso ponerse a su altura, DFW estaba analizando su propio estilo o, mejor dicho, su propia manera de ver el mundo o, lo que es lo mismo, ¿es Kafka usado como metáfora de DFW?

4 comentarios:

  1. Llevo MESES diciendo que el reino de DFW no es de este mundo...y si lees ya algo de ficción vas a alucinar pero lo más grande.

    Mi sensación con DFW siempre es de lejanía...él contempla el mundo desde su atalaya (es obvio que no es que se sienta, es que ES superior intelectualmente al 99% de la gente) y le fascina, asombra y desconcierta a partes iguales. Y desde la distancia te lo cuenta, lo que ve y lo que se le va a ocurriendo (ya sabes, todo eso del debate interior)

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    1. Esa lejanía es lo que le impide "omitir" los detalles inconscientes que a los demás nos permiten seguir viviendo... por eso era TAN PERFECTA la elección que desgraciaíto eligió para su reseña, con Funes, otro que era incapaz de omitir nada... Pero al leer este artículo (al terminar el libro volví a él) era como si le estuviera escuchando decir "eh! que yo también soy gracioso"

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  2. Mientras leía Hablemos de Langostas pensaba a ratos que este señor era gracioso, decía 'mira qué retranca tiene el jodío', pero he terminando pensando que el humor es algo accidental en la escritura de DFW. Es algo que pasa sin que él lo busque e incluso tal vez sin que él lo entienda o interprete como gracioso.

    Creo que en el caso de Kafka es exactamente lo contrario. Yo he leído un montón de cosas de Kafka y sí me lo puedo imaginar riéndose mientras escribía sus obras y les hacía putadas a sus protagonistas. Puedo imaginármelo riéndose mientras el agrimensor no consigue llegar al castillo, o mientras K. ve angustiado como se va celebrando el juicio del que no sabe de qué defenderse y de si lo que dice servirá para defenderse o para condenarse. Incluso, como dice DFW, en la colonia penitenciaria sobre la máquina que le graba los mensajes en la espalda y que terminan aprendiéndoselos...

    Desde luego que todo eso no es divertido per se, pero yo creo que Kafka sí que se reía y pensaba pero ¿no veís que eso es lo que nos está pasando? ¿no veís que es absurdo, pero es que el mundo en que vivimos es igual de absurdo?

    Coincido en que ambos eran dos inadaptados sociales que miran el mundo desde el exterior, de alguna manera. Pero sí creo que Kafka tenía sentido del humor y no me cuesta imaginármelo riéndose mientras escribe, aunque sea algo terrible. Y no puedo decir lo mismo de DFW. No creo que se ría mientras escribe.

    Pero, vamos, que son percepciones totalmente arbitrarias. Lo mismo DFW era un tío divertidísimo y que se lo pasaba estupendamente escribiendo.

    P.D: gracias por los elogios a la elección de Funes el memorioso. Es algo que me vino según leía hablemos de langostas. DFW tiene muchas similitudes con Funes.

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  3. A mí me encanta Kafka, y tampoco me parece gracioso la verdad...

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